Texto: Carmela
García Ruiz
Carmela García nos anima a seguir luchando por la IGUALDAD REAL |
Espero
que esta reflexión sea un intento de poner la lucha de las mujeres
en un primer plano y que nos creamos de verdad que unos derechos por
los que lucharon las mujeres, desde hace 150 años por la igualdad,
no nos la arrebaten.
Desde
las primeras mujeres sufragistas que perdieron la vida en Inglaterra
inmolándose por sus derechos de poder votar, elegir y ser elegidas,
hasta nuestros días ha habido muchos sufrimientos y lucha por
conseguirlo.
Un
gran crecimiento de compromiso por parte de la mujer fue en la
república donde se consiguió: el derecho al aborto, el divorcio,
incorporación de la mujer al mundo del trabajo y su compromiso
político. Por ejemplo la primera mujer ministra de la república
Victoria Kent, La Pasionaria mujer luchadora y comunista que dieron
vigor a las políticas de igualdad y dieron ejemplo de que era
posible.
En
la Guerra Civil la mujer tuvo un papel importantísimo, no solo en el
frente de batalla sino también en la retaguardia, miles de mujeres
anónimas luchadoras, que pagaron después terminada la guerra muy
caro este compromiso político, fueron fusiladas, encarceladas,
torturadas y violadas por luchar por la república y todos los
derechos democráticos, educación, sanidad, etc. y libertad en
definitiva.
40
años de dictadura fue la gota malaya que utilizo el dictador no solo
para reprimir, sino para asustar y amedrentar a la siguientes
generaciones, instalándose un limbo mental en el que nos trataron de
convencer (afortunadamente no todas sucumbieron a esta imposición).
Menospreciando
a las mujeres que no tienen hijos y que son menos mujeres por no
tenerlos; nos intentaron hacer creer que somos menos inteligentes que
los hombres.
Nos
quieren devolver de nuevo a las cocinas y hacernos en definitiva el
descanso del guerrero.
Después
de 35 años de democracia hay mujeres que no saben o no quieren saber
que la igualdad no nos la dieron, la conquistamos.
En
todas las universidades hay un mayor porcentaje de mujeres que de
hombres que terminan sus carreras; más mujeres que hombres que
estudian carreras técnicas, sin embargo llegamos a la realidad que
contratan más hombres que mujeres en puestos de responsabilidad.
¿Por
qué tanto miedo a la igualdad de oportunidades en estas situaciones
con respecto a la mujer?
No
pretendemos instalar un sistema de matriarcado, pero sí luchar
contra el sistema patriarcal que no es igualitario ni por asomo. El
sistema patriarcal es impuesto por la iglesia y por los gobiernos de
derechas para el sometimiento de la mujer en todos los ámbitos,
laboral, educativo, sanitario, etc.
Luchemos
por no ser unos simples baúles reproductivos, queremos ser mujeres
que decidamos libremente su maternidad responsable, o no ser madre,
pero libremente sin coacciones ni condenas por parte de un clero
intransigente y coactivo que, en el año 2014, sigue diciendo que no
somos iguales, que la mujer es inferior. Después de 2.000 mil años
el hombre sigue sin evolucionar.